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Lanchas a toda velocidad, chalecos de neopreno y una estela de agua que vas abriendo a tu paso es solo el comienzo de todo lo que el esquí acuático tiene para ofrecerte. Este deporte es todo un despliegue de adrenalina y destreza para deleite del practicante y del espectador.
¿En qué consiste el esquí acuático?
Lo primero que debes conseguir para hacer esquí acuático es una lancha. Este vehículo será el que te lleve de paseo mientras tú, ya sea descalzo o sobre un par de esquíes de madera, recorres las costas en busca de la aventura alucinante que es el esquí en el agua.
A un promedio de 55 km/h, los esquiadores que han decidido llevar su pasión al siguiente nivel compiten delante de jueces que evalúan las veintidós categorías que el esquí acuático tiene.
Disciplinas del esquí en el agua
Las cuatro disciplinas que lo conforman son las figuras, el slalom, los saltos y la combinada.
Figuras: es la que exige mayor equilibrio, ya que deben realizarse figuras mientras la lancha se sigue deslizando. El esquiador tendrá el desafío de mantener dicha figura usando toda su fuerza y equilibrio.
Slalom: la consigna es colocarse lo más perpendicular posible a la dirección en la que la lancha va avanzando, todo esto mientras el deportista toma el cabo con una mano y se va inclinando hacia ambos lados para lograr la posición. Ahora es turno de saltar sobre la estela que ha quedado grabada en el agua.
Saltos: consiste en deslizarse por una plataforma que fue cubierta con cera para permitir un trayecto liso y veloz. Es una de las técnicas favoritas en las competencias de esquí acuático.
Combinada: esta modalidad está reservada para los más experimentados, ya que conjuga elementos de las otras tres.
Lugares ideales para hacer esquí en el agua
Cabo de Gata: este pintoresco lugar de Almería cuenta con vastas y abiertas playas que permiten practicar este deporte con soltura. Además, tiene atracciones tan pintorescas, tales como pueblos, parques y restaurantes, que la experiencia de visitarlo para hacer esquí acuático se convertirá en algo mucho más global y disfrutable.
Almuñécar: “la herradura” en el litoral de Granada es un hermoso e inmenso lugar para practicar esquí en el agua. Desde las aguas se pueden apreciar los acantilados que ofician de marco de este escenario paradisíaco de los amantes de los deportes al aire libre y de la naturaleza.
San Pedro de Alcántara: las costas de Málaga están bañadas por las mismas aguas azules que invitan a hacer esquí acuático a lo largo de sus anchas playas pensadas para explorar el mundo desde una perspectiva acuática. Una de las características que más llaman la atención acerca de esta playa, es que sus arenas son oscuras y también está cubierta de grava.
Motril: muchas empresas de aventura se han instalado en la Costa Granadina para ofrecer a turistas y locales la oportunidad de realizar, entre muchas otras actividades, esquí en el agua. Con paisajes de ensueño y aguas perfectas para la actividad, Motril es otra de las favoritas para practicar este deporte que crece día a día.
Para concluir, el esquí acuático pasó de ser un hobby a ser toda una actividad de competencia profesional. Las costas de Málaga y Granada están recibiendo cada día a más aficionados del deporte que desean practicarlo. Puedes elegir entre Cabo de Gata, Motril, Almuñécar y San Pedro de Alcántara para exhibir lo que has aprendido de esta disciplina.
Foto: Emilio Küffer