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Turismo rural
El mayor encanto del turismo rural radica en poder entender que no necesitamos encarar el turismo desde una gran urbe, sino que es posible disfrutar de un descanso tranquilo, silencioso, en contacto con la naturaleza y en un alojamiento familiar, al tiempo que descubrimos un estilo de vida tan dispar con la nuestra, que hasta llegamos a pensar que estamos en otro mundo.
Características del turismo rural
Una de las características que más definen a este tipo de turismo es que se lleva a cabo en localidades que cuentan con un promedio de 1.500 habitantes.
El alojamiento tiene lugar en antiguos caseríos que han sido restaurados y ahora son posadas que reciben a turistas de todas partes del mundo y les ofrecen un trato cordial y familiar. Una vez que se tiene la oportunidad de probar cómo es quedarse en estos alojamientos, ya será difícil retornar al trato amable, pero indudablemente frío y distante de los hoteles.
Por último, poder apreciar la historia y la cultura del lugar está incluido en el paquete, pero es indiscutible que no tiene precio. El verde de las zonas rurales será un bálsamo para nuestros agotados ojos, y el adentrarnos en una cultura que tiene tanto para enseñarnos, nos hará aprender mucho más de la naturaleza humana de lo que creemos posible que el turismo rural pueda enseñarnos.
Actividades para hacer en nuestras vacaciones rurales
Degustaciones: la gastronomía enraizada en la tierra está totalmente conectada a las vacaciones en áreas rurales. No sólo se podrán degustar productos caseros, elaborados por manos con experiencia de años en el tema de la alimentación, sino que los vinos regionales, producidos en el mismo lugar en el que nos estamos alojando, forman parte de los placeres que el turismo rural nos tiene deparados.
Caminatas: una vez se comienza a caminar por las verdes praderas, será muy difícil detenerse. Por lo tanto, además de descansar estaremos realizando un muy efectivo ejercicio físico y le daremos a nuestros ojos el descanso que hace tiempo nos estaban pidiendo.
Cabalgatas: si no se tiene experiencia en montar a caballo, esta es la mejor forma de adquirirla, mientras que aquellas personas que ya tengan la técnica dominada, podrán sacar el máximo provecho de sus vacaciones rurales luciéndose sobre un auténtico caballo de campo.
Tomar Conciencia: las zonas rurales mezclan naturaleza con ciertos toques de urbanidad. De modo que al entrar en contacto con ellas estaremos tomando conciencia de la importancia que implica que el ser humano se responsabilice en preservar los pulmones del planeta y el ecosistema que hace posible sustentar muchos modos de vida.