Si te apasiona viajar a través de un crucero, te contamos algunas ideas importantes que no debes pasar desapercibido, de esa manera adquirirás una experiencia positiva.
¿Qué es un crucero?
Podemos definir un crucero como un tipo de viaje turístico en el que se recorre una ruta específica en embarcación, la cual está repleta de pasajeros y con fines de entretenimiento, descanso, ocio y placer. Durante un crucero, los pasajeros disfrutan de una combinación de alojamiento, comida, entretenimiento y otras actividades a bordo, así como visitas a tierra de acuerdo con el itinerario marcado en el propio viaje.
Los cruceros ofrecen una experiencia inolvidable, ya que pocas personas lo olvidan, siempre quedará el recuerdo de aquel momento entrañable. Los pasajeros tienen la oportunidad de relajarse y disfrutar de múltiples comodidades a bordo del barco, como restaurantes, bares, piscinas, jacuzzis, gimnasios, spas, teatros, espectáculos musicales, casinos e incluso tiendas orientadas a las ventas de productos, entre otros.
Además de las comodidades de las que dispone la embarcación, los cruceros suelen hacer paradas en diferentes puertos a lo largo de su trayecto, esto es muy relevante en la medida que permite a los pasajeros explorar y disfrutar de otras culturas, gastronomía y demás vivencias ofrecidas en cada destino a desembarcar. Aunque estas paradas suelen ser de corta duración, realizar excursiones y otras actividades turísticas en tierra es un plus para los propios viajeros que les libera de estar todo el tiempo en el interior del barco.
Los cruceros pueden variar en cuanto a su duración, así tenemos los diseñados para viajes cortos, es decir, de unos pocos días, hasta trayectos de varias semanas. Además, hay una amplia variedad de opciones para el turista, por ejemplo, cruceros por el mar, cruceros fluviales o los denominados temáticos que se orientan a intereses específicos, como la gastronomía, el arte, la música o los deportes.
El costo de un crucero varía significativamente, todo depende de diversos factores, concretamente: la duración del viaje; el destino elegido; la temporada es también un factor muy relevante; la línea de cruceros, en cuanto a su modernidad e instalaciones; además, las comodidades o elementos adicionales que se contraten igualmente influyen en su precio final. Existen packs con descuentos atractivos, una buena opción para encontrar aquel que más esté acorde con sus intereses.
En definitiva, los cruceros pueden tener una amplia gama de precios, desde los que incluyen opciones más económicas hasta aquellos considerados de lujo, en estos últimos es obvio que el precio sube más desorbitadamente. Es importante conocer lo que incluye el viaje y todo aquello que hay que contratar independientemente, de esta manera tendremos un presupuesto más acertado, sin sorpresas o sobresaltos inesperados.
Afortunadamente los precios han bajado considerablemente si se compara con los cruceros de antaño, los cuales solo podían disfrutarlos personas muy adineradas. Hoy existen ofertas desde 500 euros, sin incluir tasas, en donde la comida, servicio de habitaciones y determinadas actividades están aseguradas. Estas ofertas se contratan con bastante antelación y pertenecen a las denominadas ofertas de “temporada baja”. Los cargos adicionales o “extras” no quedan comprendidos en el precio base, por lo que de ser contratados, incrementarían el coste del viaje.
Tipos de cruceros
Como ya expusimos, existen diferentes tipos de cruceros, cada uno con características y enfoques diferentes. A continuación, te expongo algunos de los más comunes en el mercado:
Cruceros por el mar: Son los más tradicionales, su ruta consiste en recorrer océanos y mares. Ofrecen una amplia variedad de destinos y suelen tener una amplia gama de comodidades y entretenimiento a bordo. Especialmente indicados para apasionados al mar, en el que su olor característico o el sonido de las olas sumergen al turística en un ambiental muy apetecible, al mismo tiempo que si está atento, también puede observar fauna característica, especialmente marina, incluso determinadas aves, a medida que se acerca a áreas cercanas a tierra.
Cruceros fluviales: Estos cruceros, como su nombre indica, se llevan a cabo en ríos y vías navegables más pequeñas, por ejemplo, regiones como Europa, Asia y América. Son conocidos por ofrecer un ambiente más íntimo, muy propio para explorar destinos con cierta cultura arraigada, en la que no pasa desapercibido las ciudades históricas, cercanas a las aguas interiores por el que el barco va realizando su ruta.
Cruceros de expedición: Están diseñados para explorar destinos muy distantes y salvajes, como la Antártida o el Ártico, sin olvidar selvas amazónicas y zonas salvajes. Las embarcaciones suelen ser más pequeñas, de esta manera se acceso más fácilmente a lugares remotos. Por supuesto, la experiencia aventurera, la observación de vida silvestre (fauna y flora) y muchas actividades al aire libre están aseguradas.
Temáticos: Estos cruceros se centran en un tema o interés particular, por lo que son más monográficos, como la música, el cine, la gastronomía, el bienestar, los deportes, la cultura o la historia. Pueden incluir presentaciones, talleres de aprendizajes, conferencias y actividades relacionadas con el tema elegido.
Cruceros de lujo: Son cruceros de muy alto standing. Ofrecen servicios y comodidades a todo lujo. Tienen una atención personalizada, suites elegantes, restaurantes gourmet, mayordomos privados y acceso exclusivo a áreas y servicios adicionales. Estos cruceros no están al alcance de cualquier persona, solo para aquellas más privilegiadas.
Estos son algunos ejemplos de tipos de cruceros que puedes encontrar en el mercado, si bien, cada empresa puede ofrecer una combinación de productos y servicios, en muchas ocasiones adaptables a cualquier alcance, por lo que es importante investigar y comparar sus opciones para seleccionar el crucero que mejor se ajuste a los intereses y necesidades del cliente.
Realmente existen cruceros baratos
Existen ofertas, generalmente dependiendo de la temporada, lugar elegido, la propia reserva realizada con antelación, programas de fidelización, aquellos que vienen de “vuelta” (regresan a su punto inicial, aprovechando ese viaje para alojar a nuevos viajeros a precios más económicos). En definitiva, con todos estos factores puedes conseguir un crucero realmente al alcance de tu propio bolsillo.
