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La capital de Bélgica abre sus puertas para desplegar ante ti callecitas cargadas de historia, pero con todas las comodidades que las ciudades modernas saben ofrecer. En los rincones de Bruselas yace la cuna del chocolate más exquisito y de las cervezas con más cuerpo, sabor y color. A continuación te contamos por qué debes elegir a esta pequeña gran urbe para hacer turismo.
Actividades y lugares que tiñen tu paseo en Bruselas de puro ensueño
Mont des Arts
El mejor mirador de la ciudad cumple también el rol de dar la bienvenida a Bruselas en las mismas puertas del sector histórico de la ciudad. Desde este monumento se nos obsequia la mejor vista que la ciudad es capaz de desplegar: el Atomium, la Grand Place y la famosa catedral son sólo algunos de los emblemas que tendremos la oportunidad de ver.
Catedral de San Miguel
Este monumento es una de las mejores representaciones del tan afamado estilo gótico. Su interior es el hogar de los restos mortales de nada menos que Santa Gúdula, por ello es que hoy en día es conocida por este nombre también. Una vez que estamos dentro de la catedral, no podremos dejar de sorprendernos por la austeridad que exhala, pero esta no estaba planificada cuando fue construida, sino que fueron los protestantes y revolucionarios provenientes de su país vecino, Francia, los que la saquearon y la dejaron en el estado actual.
Manneken Pis de Bruselas
Es en la parte del casco antiguo de la ciudad que esta pequeña estatua de medio metro de alto, la cual está formada por un niño que orina en una fuente, adorna las calles y la hacen estallar con maravillosas leyendas que van desde un niño que con su orín apagó una llama que pronto incendiaría a la ciudad, hasta la de una maléfica bruja que con sus poderes transformó a un inocente hijo de un noble en esta bellísima estatua.
Mansión de los Duques de Brabante
Testigo de acontecimientos que formaron parte de la Historia Universal, las seis casas gremiales y las estatuas de estilo barroco hoy albergan al Museo de la Ciudad de Bruselas. Hay mucho por descubrir entres sus sólidas paredes.
Atomium
Desde el año 1958 esta escultura que se ha convertido en un símbolo de Bruselas se erige para salpicar el pintoresco paisaje con la impronta que la modernidad otorga. Al verlo, estamos presenciando una ampliación que supera las 160.000 millones de veces el cristal de hierro. Las nueve esferas que lo conforman estaban destinadas a quedarse allí por medio año, sin embargo, ante la respuesta del turismo, se ha decidido conservarlas.
Gastronomía, algunos de sus platos típicos
El plato típico por excelencia son las patatas fritas (frites), frituras que se realizan con mucho mimo, con un toque muy especial que le convierte en uno de los platos más populares de la ciudad.
Las patatas fritas se pueden acompañar con otros alimentos, especialmente los mejillones, convirtiéndolo en otro plato típico denominado moules.
Entre verduras, las coles de Bruselas son muy populares, también se sirven con un toque gastronómico muy especial.
Las carnes igualmente constituyen una alimentación que consumen con gran agrado, como es el caso de las costillas asadas y determinados estofados realizados con carnes.
Los quesos son muy variados y les gusta comerlos como postres al igual que su famoso chocolate.